Las manicuras de 2026 se alejan del artificio y apuestan por una belleza más íntima, más conceptual y sensorial. El regreso a lo esencial no es sinónimo de aburrido, sino de refinamiento. La estética de uñas ya no responde solo a la moda, sino a una forma de habitar el cuerpo con autenticidad. Desde París hasta Berlín, pasando por Milán y Copenhague, las tendencias nos hablan de introspección, de juego con la textura, del poder de lo mínimo y...¿lo mejor? Ya han aterrizado e